La magnitud y extensión de los problemas que afectan la salud psicológica indican que los métodos convencionales de Ia clásica higiene mental, basados en el criterio preventivo individual, en el diagnóstico y tratamiento precoces y en el perfeccionamiento de la asistencia, no son ya útiles ni adecuados para un enfoque profiláctico dentro de las modernas orientaciones de la salud publica. Los iniciadores del movimiento de higiene mental, a comienzos de siglo, proclamaron la abolición de la enfermedad mental mediante la aplicación de algunas reglas psicológicas para una existencia higiénica.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)