¿Se impondrá el tractor en los trabajos agrícolas, en determinadas regiones, por el valor de los campos de pastoreo, el precio del combustible, mano de obra, profundidad de las labranzas, grado de intensidad de los cultivos?
¿Será el kerosene un artículo de fácil adquisición, de clase uniforme y de prendo limitado?
¿Responden los actuales tractores en uso a las necesidades de nuestra agricultura?
Para contestar estas preguntas y con el objeto de organizar una estadística, el Ministerio de Agricultura ha iniciado una encuesta entre los agricultores, abundando en detalles prácticos, desde luego, para que el agricultor pueda responder no obstante sus rudimentarios conocimientos de mecánica. Pero el desideratum sería complementar este resultado con ensayos técnicos, consignando los valores que se obtengan con experiencias determinadas.
Con este criterio hemos ensayado un tractor de los más acreditados en el comercio, y en carácter de trabajo práctico de los que realizan los alumnos de esta Facultad del curso de Maquinarias Agrícolas. Se trata de un tractor «Deering» de la Internacional Harvester Co, cedido gentilmente para tal objeto por la casa introductora.