Una vez escuché llamar a los Programas de Estudio la Carta Magna del estudiante. Una suma de derechos, un límite al poder docente, concebido al modo del Poder del Estado que se restringe con una suerte de “nulla examen, nullo aplazo, sine programa previo, stritcto y scripto”.
Esta concepción del Programa, y por cierto de la enseñanza y la evaluación, puede, sin embargo, ser observada desde otras perspectivas, y con otros puntos de vista.
En este caso estudiaremos los Programas de Derecho Penal. Intentaremos describirlos teniendo sus autores en cuenta el Plan de Estudios en el que se insertaban, su orientación teórica, la bibliografía que señalaban, pero también el contexto histórico y social, con una referencia especial a la conflictividad social y a los mecanismos de control social.
El primer programa que fue posible encontrar, corresponde a Derecho Penal Argentino, una asignatura del Curso Profesional de la facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la UNLP. Data de 1906.