El presente no pretende ser más que un aporte documental sobre el uso en forma discrecional del Tesoro de la provincia de Buenos Aires por parte del General Urquiza, durante el período comprendido entre los meses de febrero y setiembre de 1852.
“Una de las razones que movieron el ánimo de Buenos Aires contra Urquiza fue el uso arbitrario que éste hizo del Tesoro de Buenos Aires al que entró a saco. Apenas llegó a Buenos Aires cuando comenzó a distribuir graciosamente, fuertes sumas de dinero entre sus allegados”. Durante el sitio de Buenos Aires, El Progreso, diario oficial del gobierno de la defensa, publicó el 19 de abril de 1853 un artículo en el que fustigaba, no sin razón pero algo exageradamente aquella política.
Decía al respecto: “Buenos Aires recordará que en la época de Rosas, su Sala de Representantes sancionó que la Casa de la Moneda entregase al gobierno los diez millones trescientos mil pesos pertenecientes al Crédito Público, y que dicha Casa de Moneda fuera recogiendo de la plaza todos los meses hasta trescientos mil pesos hasta dejar totalmente amortizada la emisión.