Luego de la última extinción de grandes mamíferos –alrededor de 10.000 años atrás– se produjo un aumento demográfico del guanaco que posibilitó la rápida expansión de las poblaciones humanas. Este animal fue la principal presa de las poblaciones humanas cazadoras-recolectoras en Patagonia y proveyó alimento y materias primas (pieles, huesos, grasas, entre otros) durante milenios.