Mirar de frente al éxito equivale a asomarse a un precipicio; se retrocede a tiempo o se cae en eI para siempre. El éxito es un precipicio irresistible, como una boca juvenil que incita al beso. Muy pocos retroceden.
Información general
Fecha de publicación:1906
Idioma del documento:Español
Revista:Archivos de Pedagogía y Ciencias Afines; vol. 1, no. 1
Institución de origen:Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales
Excepto donde se diga explícitamente, este item se publica bajo la siguiente licencia Creative Commons Attribution-NonCommercial-ShareAlike 4.0 International (CC BY-NC-SA 4.0)