Las fuentes de donde se desprendern todos los análisis [del libro] son las personas; el trabajo es su actividad en común y su subjetividad se expresa en boca de Sennett. Las vicisitudes en el seno del trabajo de estas personas son el correlato empírico de las argumentaciones de Sennett. Las personas de carne y hueso hablan por el autor, ellas construyen el relato, no el ampuloso escritor. El artilugio consiste en sustentar las propias opiniones del autor y sus teorías, en las palabras de los protagonistas de las nuevas formas de trabajo en el capitalismo moderno.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)