Han transcurrido 120 años desde el final del proceso de ocupación por parte del Estado nacional de las tierras pampeano-patagónicas, conocido como ‘Conquista del Desierto’; en ese lapso de tiempo, pocos historiadores han intentado una posible interpretación de los hechos, y menos aún se propusieron analizar los alcances que tuvo la expansión del dispositivo de poder estatal sobre los pueblos que habitaban originalmente en las regiones destacadas.
Es en este sentido que el libro de Walter Delrío ya ha ganado un lugar privilegiado en la narrativa historiográfica que pretende lograr una lectura crítica de los alcances que ha tenido la dinámica de constitución del Estado-nación durante el último cuarto del siglo XIX.