Se designa comúnmente con el nombre de fosfolípidos, lipoides o liftin a todos aquellos lípidos que incluyen entre los productos de su hidrólisis a los siguientes compuestos: dos moléculas de ácidos grasos, una de ácido fosfórico y una de glicerol; algunos de ellos contienen también una molécula de una base nitrogenada y otros de un catión: calcio o magnesio.
Según Rewald, B. debe darse preferencia al nombre de lipoides. No son sustancias de reserva, que forman parte constituyente del protoplasma, atribuyéndoseles un papel importante en las propiedades osmóticas, como asimismo en los problemas oxidativos.
Los lipoides más comunes en las plantas son la lecitina, cefalina y el ácido fosfatídicos generalmente solubles en mezclas de éter y alcohol o éter de petróleo, de cuyas soluciones son precipitados La base nitrogenada es la que determina la diferencia entre la lecitina y la cefalina; en la primera es la colina y en la segunda la colamina, mientas que el ácido fosfatídico generalmente se encuentra combinado con el calcio y el magnesio.
Se observa, en general, en las Fanerógamas que a medida que aumenta la cantidad de materia proteica, aumenta también el porciento de lechina y cefalina, especialmente en la hoja