Los argumentos de la defensa jurídica con que el gobierno argentino evitó que se ejecutara en Texas al cordobés Víctor Saldaño, que había sido condenado a morir con una inyección letal, cambió hace días la jurisprudencia en los Estados Unidos.
Desde que el Gobierno logró revertir la sentencia, más de diez abogados, defensores de ocho presos condenados a muerte, solicitaron en las últimas horas y en forma urgente ayuda legal a la Cancillería.