En inglés
The aim of this study was to provide data on the frequency of Top 7 Shiga toxin-producing Escherichia coli (STEC) and microbial population counts on processed beef from Argentinean Kosher cattle abattoirs authorized to export to Israel. A total of 480 samples (forequarters, primal cuts, trimmings) were taken and analyzed for Top 7 STEC detection and isolation and for mesophilic aerobic organism, coliform and E. coli enumeration. Differences in stx detection and microbial population counts on forequarter samples before and after salting were not statistically significant (P >0.05). All samples were negative for Top 7 STEC. Differences were significant for all microbial counts in primal cuts (P <0.001). Neck samples showed a higher level of contamination with the three groups of microorganisms than fore shank and brisket samples. The prevalence of stx was lower than that reported worldwide and in Argentinean export abattoirs. Salting did not significantly reduce the microbial load on forequarters.
En español
El objetivo de este estudio fue determinar la frecuencia de Escherichia coli productora de toxina Shiga (STEC) Top 7 y realizar recuentos de poblaciones microbianas en carne Kosher de frigoríficos argentinos autorizados para exportar a Israel. Se tomaron 480 muestras (cuartos delanteros, cortes y recortes) y se realizó la detección y aislamiento de STEC Top 7 y el recuento de microorganismos aerobios mesófilos, coliformes y Escherichia coli. No se identificaron diferencias estadísticamente significativas (P >0,05) en la detección de stx y en los recuentos de poblaciones microbianas en las muestras de cuartos delanteros antes y después del salado.
Todas las muestras fueron negativas para STEC Top 7. Se hallaron diferencias estadísticamente significativas (P <0,001) en todos los recuentos de poblaciones microbianas de los cortes. Las muestras de cogote tuvieron recuentos de poblaciones microbianas mayores a los de las muestras de brazuelo y pecho. La prevalencia de stx obtenida en el presente estudio fue menor a las reportadas en el resto del mundo y en frigoríficos exportadores de Argentina. El salado no redujo significativamente la carga microbiana de los cuartos delanteros bovinos.