El sistema internacional sufrió diversos cambios en los últimos años, lo que generó nuevos actores y nuevos conceptos acerca de la seguridad. La globalización aliada al neoliberalismo creó nuevas amenazas globales en una arena en la cual los Estados no consiguen mantener el orden interno y tampoco consiguen restringir las amenazas externas a sus propios territorios. Esos cambios en el sistema internacional también contribuyeron a la profundización de las diferencias entre los Estados desarrollados y los Estados periféricos que siguen sufriendo directamente los efectos de las transformaciones económicas, políticas, ideológicas y sociales del sistema.