La subjetividad está fragmentada y las experiencias han llegado a su fin en la posmodernidad. Esas son dos de las tesis más repetidas en los tiempos que corren. El sujeto se espectaculariza para poder visibilizarse, para ser reconocido por su grupo social. En la posmodernidad el sujeto socializa con las tecnologías y los mass media de por medio: computadores, chats, televisión, radio, revistas… El sujeto consume ese espectáculo y se moviliza para poder ser parte del mismo, caso contrario siente que no existe. La televisión ha alimentado, como ningún otro medio de comunicación, la idea de que si no hay espectacularización, no hay sujeto posible, existente, real.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)