Roxana Páez reúne en este libro las poéticas de dos escritores argentinos, Juan L. Ortiz y Francisco Madariaga, según aspectos que permiten definir sus producciones como singulares. En efecto, la autora se centra en el análisis del espacio desde una perspectiva que no implica una vuelta al mito de origen, de lo natal, de lo regional sino, por el contrario, un diálogo entre el lenguaje y la naturaleza donde lo espacial es escrito por el lenguaje y el resultado de una escritura determinada.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)