Los escenarios globales se encuentran en franca vulnerabilidad debido al fracaso de los modelos económicos imperantes y a los procesos de cambio de paradigmas que se vienen sustanciando desde la aparición, con fuerte protagonismo, de las variables tecnológicas y las nuevas practicas de relación social. Nuestra región ha sabido soportar estos impactos y hoy se perfila una gran alternativa para proponer un nuevo modelo de desarrollo. Particularmente, nuestro país lidera este proceso, lo que constituye la mejor oportunidad para poner en valor las expectativas de cambio que sugiere nuestra intervención desde el diseño.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)