En español
Una de las consultas más frecuentes en pediatría es la fiebre, porque su aparición produce alarma en los padres, lo que hace importante normatizar el tratamiento. Para ello se estudió el uso de antitérmicos,
en la Red de Atención Primaria de la Municipalidad de Lanús (Argentina), dentro del Programa
de Farmacoepidemiología. Se encuestó al 69% de los pediatras municipales y se compararon los resultados con los obtenidos en un estudio similar realizado en Nueva York. Se observa que el 50% de los médicos neoyorquinos
y el 41% de los de Lanús, alternan diferentes antitérmicos, siendo esta práctica más frecuente entre los médicos de menos de 20 años de profesión. Considerando los intervalos entre las dosis, en Lanús sólo un 16% de los pediatras genera superposiciones de antitérmicos, contra un 47% detectado en Nueva York. Esta superposición puede provocar que se alcancen dosis tóxicas o un aumento de reacciones adversas,
por lo que no se recomienda esta modalidad de tratamiento.
En inglés
One of the most frequent consultations in pediatrics is fever, because its appearance alarms parents, that is why it is important to establish norms for its treatment. For that reason the use of antithermic drugs has been studied at the Primary Attention Center of the Municipality of Lanús, in the
Program of Pharmacoepidemiology. As much as 69% of the municipal pediatricians have been interviewed and the results were compared with those of a similar study made in New York. It was observed that 50% of the
physician from New York and 4% of those in Lanús alternate different antithermic drugs, being this more frequent
among the physician under 20 years of profession. Considering the intervals among the doses, in Lanús only 16% of the pediatricians cause antithermic drugs overlapping, against 47% detected in New York. These overlapping can lead to toxic dose or an increase in adverse reactions because of the combined treatment. Therefore
this treatment modality is not recommended.