Tanto la enseñanza como el aprendizaje son prácticas mediadas. En tal sentido, en estas instancias lo más habitual es que el vínculo entre el docente y sus estudiantes se lleve a cabo a través de materiales educativos que ingresan como medios didácticos. En el caso de los procesos que se desarrollan mediados por tecnologías, los materiales cobran aún mayor relevancia. Por esta razón, al momento de su elaboración una premisa para el docente que los elabora es la de escribir sus materiales para ayudar a pensar a los alumnos. Como señala Asinsten (2007), la mencionada pauta es lo que establece en el proceso elaborativo “el norte y lo que marca la diferencia entre un buen o mal docente-contenidista (p. 88). En virtud de lo expuesto, en este trabajo presentaremos algunas reflexiones teóricas en torno a la elaboración de materiales didácticos entendida como un singular proceso de escritura. Fundamentalmente, esto implica que en dicha producción intervienen estratégicamente la mediación de distintos lenguajes y soportes como también su combinación con recursos TIC, todo ello sobre la base de una dinámica de trabajo procesual tanto en una dimensión cognitiva como operativa. Por último, cabe destacar que las ideas y reflexiones que desarrollamos forman parte de la fase pre-activa de un proyecto de investigación titulado “Bimodalidad en universidades públicas del NOA: un estudio sobre las conceptualizaciones y experiencias pedagógicas” (SECyT- UNCa).