La posibilidad de vida fuera de la Tierra es una idea que preocupa al ser humano desde hace mucho tiempo y que tiene implicancias no sólo científicas sino filosóficas y religiosas. Dentro del ámbito de la literatura, ha sido explorada desde Luciano de Samosata (siglo II AD) por numerosos escritores, y luego se ha afianzado en el siglo XX como uno de los tópicos preferidos del relato de ciencia ficción, el comic y el cine. Ahora bien, dentro del ámbito científico la propuesta de hipótesis choca con el inconveniente de que es difícil generar conjeturas plausibles que no estén sesgadas de una forma u otra por el conocimiento de la vida y su evolución en la Tierra. Formas de vida alternativas apenas serían especulación pura. Sin embargo y afortunadamente, el conocimiento de la vida en la Tierra está lejos de ser completo, y todo el tiempo hay descubrimientos que indican que la vida tal como la conocemos es más diversa, más amplia y más resistente que lo que nuestros modelos asumen. Esto es así al grado tal de que no existe consenso completo sobre una definición precisa de lo que llamamos vida.