En la Plaza Islas Malvinas de La Plata, donde en 1982 funcionaba el Regimiento 7 desde el cual partió la mayoría de los 38 jóvenes provenientes de esta ciudad caídos en el Atlántico Sur, tres columnas de hormigón que representaban a las Fuerzas Armadas pretendieron erigirse como el mejor homenaje para ellos. Este año fueron resignificadas por excombatientes que entendieron que los pilares de la democracia se apoyan en el sacrificio de sus compañeros, y que estos, desde el debilitamiento del tejido social que implica la ausencia, se convierten en su más rígido sostén cuando son recordados. Memoria, Justicia, Soberanía: de la guerra a la militancia.