Los avances de la tecnología en el nuevo milenio han provocado cambios importantes. La denominada “Revolución de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC)” ha influenciado en todos los campos del desarrollo humano.
El crecimiento de la economía en general está totalmente asociado con el sector de las TIC’s ya que su implementación tiene impacto en la sostenibilidad económica, social y ambiental. Ello se debe a que sus productos y servicios favorecen a la creación de riqueza y bienestar de la ciudadanía en general, además de ser esenciales para la creación, intercambio y difusión del conocimiento.
Al entrar de lleno al siglo XXI en donde la tecnología pasa a tener un rol fundamental en nuestras vidas, la modernización del Estado pasa a formar parte de los principales desafíos que tendrá que enfrentar el país durante los próximos años.
En la administración pública, la utilización de las TIC’s se ve reflejada en los distintos órganos del Estado mediante la implementación de programas de gobierno digital o electrónico.
No caben dudas que las TIC´s resultan herramientas con un gran potencial para establecer estructuras organizativas y apoyar los modelos de gestión pública de un país, lo que permite ofrecer una respuesta ágil, eficiente, de calidad y transparente a los servicios que requieren los ciudadanos. Este desafío, hoy en un mundo globalizado cobra real importancia, debido a la redefinición del rol del Estado.
En esta presentación, ante la existencia de las TIC’s y el reconocimiento de su utilidad por la Sociedad, se pretende evidenciar si el Estado/Gobierno las utiliza para su gestión y, en consecuencia, cuales son los beneficios que le genera la información obtenida en la toma de decisiones sostenibles. Hoy la transferencia de la información es relevante, para uso de quienes promueven el desarrollo (planificadores, empresarios o administradores, autoridades políticas, académicas etc.) es considerada como una de las condiciones claves para el desarrollo y para un proceso de cambio, más racional, efectivo y moderno.
Entre los retos a enfrentar como profesionales de las ciencias económicas debemos asumir el compromiso de favorecer que el Estado valorice la utilización de las TIC’s. Creemos que la transición hacia una sociedad inteligente no solo es necesaria, sino que además es posible.